Un enfermero de primera línea iraní ha ganado la primera medalla de oro de su país en los Juegos Olímpicos de Tokio. Javad Foroughi ha establecido un récord olímpico en su camino hacia el oro en la prueba masculina de pistola de aire comprimido a diez metros.
Según las noticias, el Sr. Foroughi, que trabaja en una sala de COVID-19 en un hospital de la Guardia Republicana, se ha contagiado del virus dos veces, y entrenaba después de sus turnos en el sótano del hospital. La segunda vez que padeció el virus estuvo enfermo y no pudo entrenar durante un mes.
Tras ganar la medalla, el Sr. Foroughi ha declarado:
"Como enfermero le digo a todo el mundo que si seguimos los protocolos nadie tendrá la COVID-19 y todo el mundo estará sano. También le digo a todo el mundo, como tirador y como enfermero, que apoyen la salud de los demás, y estoy muy contento de que no se hayan suspendido las olimpiadas por la COVID-19".
El Director General del Consejo Internacional de Enfermeras Howard Catton se ha sumado a las felicitaciones afirmando que "En nombre de toda la familia del CIE deseamos trasladar nuestros mejores deseos a Javad por su excepcional logro en las circunstancias más difíciles. Estoy seguro de expresar los pensamientos de las enfermeras, no solo en Irán sino en todo el mundo, cuando digo que Javad nos ha inspirado a todos no solo por ser un tirador de primera sino también porque representa el valor y la fortaleza de todas nuestras enfermeras frente a la pandemia de COVID-19".
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