La Alianza Mundial de Profesiones de la Salud insta al G20 a proteger a los trabajadores sanitarios que se están enfrentando al COVID-19
La Alianza Mundial de Profesiones de la Salud (WHPA), de la que forma parte del Consejo Internacional de Enfermeras, ha escrito una carta abierta a los líderes del G20 solicitando una acción coordinada para garantizar la protección de la cadena de suministro de equipos de protección individual (EPI) para todos los profesionales de la salud y trabajadores sanitarios en primera línea contra el COVID-19. La carta insta al G20 a “dar pasos adecuados inmediatamente para reactivar y garantizar las cadenas de suministro de EPI de forma rápida y consistente desde la fabricación hasta las aduanas, la adquisición y la entrega.”
La alianza de enfermeras, farmacéuticos, fisioterapeutas, dentistas y médicos ha instado a los líderes mundiales a “dejar de lado la geopolítica para garantizar la cadena global de suministro de EPI antes de perder más personal y, como consecuencia, más pacientes.”
Annette Kennedy, Presidenta del Consejo Internacional de Enfermeras (CIE), ha declarado:
“Es hora de que los líderes políticos den un paso al frente de la misma forma que lo están haciendo los trabajadores sanitarios para prestar cuidados poniendo en riesgo su propia salud y sus vidas luchando contra el COVID-19. Necesitamos multilateralidad y cooperación para garantizar que las enfermeras y otros trabajadores en primera línea reciben la protección que necesitan para seguir prestando cuidados esenciales a los pacientes en condiciones muy difíciles.
Instamos a los líderes del G20 a buscar soluciones creativas, en particular a invertir en la fabricación en varios países con el fin de incrementar el suministro de EPI. Los fabricantes también han de mirar más allá de sus fronteras y trabajar juntos para resolver la actual crisis de la cadena de suministro de EPI.”
El Director General del CIE, Howard Catton, ha declarado:
“En primer lugar, el CIE planteó la necesidad de garantizar la cadena de suministro de EPI a principios de año ante la creciente preocupación en relación con el COVID-19 y, aunque se hayan producido algunas mejoras, en estos momentos vemos tasas de infección en aumento y, trágicamente, más muertes entre nuestras enfermeras en primera línea incluso en países con sistemas de salud relativamente fuertes. Ahora estamos asistiendo a la aparición del virus en África y América Latina y estamos recibiendo informes de todas las regiones sobre la ansiedad de algunas enfermeras y su miedo a trabajar por no disponer de EPI.
No se aíslen en su liderazgo político como miembros del G20 porque aplaudir a las enfermeras está muy bien pero ustedes se encuentran en una posición única para coordinar y garantizar una adecuada fabricación y distribución de EPI. Se lo deben a todas las enfermeras y trabajadores sanitarios a los que acertadamente llaman héroes.”
Otmar Kloiber, Presidente de la Asociación Médica Mundial, ha declarado:
“La carta es un firme llamamiento a los líderes de las mayores economías a hacer más para ayudar a quienes están cuidando de los enfermos y los débiles en esta pandemia. También es una fuerte petición de solidaridad hacia las economías más pequeñas y débiles, para que no se olviden de sus ciudadanos durante esta crisis.”
En dicha carta abierta publicada el 9 de abril de 2020, las cinco organizaciones, que juntas representan a más de 31 millones de profesionales sanitarios en todo el mundo, afirman que la cooperación internacional también contribuiría a que los países de renta baja con menos ingresos accedan al equipo fundamental necesario para proteger a su personal de salud. “Ante una pandemia mundial no hay espacio para egos nacionales,” han concluido.
El Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la Organización Mundial de la Salud, ha declarado que "La escasez crónica y global de equipos de protección individual es una de las amenazas más urgentes para nuestra capacidad colectiva de salvar vidas."
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